Sinopsis [hecha por mí]: Regina Marie Calcaterra, ahora es una reconocida comentarista política de Estados Unidos, pero tuvo que librar muchos obstáculos para llegar a ser quien es… De entre las múltiples adversidades con que se encontró, la más importante fue sobrevivir (junto con sus hermanos) a media vida de maltratos y abandonos por parte de su madre; y, por otra parte, tuvo que buscar la manera de resistir las experiencias resultantes de ir de un hogar sustituto a otro, donde siempre se sintió como una “niña de alquiler”.
Cita para recordar:
—¡A lo mejor hasta construimos un volcán de lodo! —le digo.—Sí… —cavila, pero enseguida se detiene y me mira —. No hay que pagar por el lodo, ¿verdad?—No, linda. No hay que pagar —ella asiente con la cabeza y se queda viendo a Cookie y a Norman por la ventana. Mis ojos se llenan de lágrimas. A los siete años, Rosie ya ha comprendido que somos pobres.
Mi opinión: Regina Calcaterra, a través de una memoria novelizada, narra las vicisitudes a las que tuvo que enfrentarse en su infancia, y gran parte de su adolescencia, para constituir un precedente en cuanto a niños que se sirven de hogares sustitutos y que han podido concluir estudios universitarios.
Grabada en la arena, es una historia autobiográfica mostrada a través de un prólogo -que a primera vista no ayuda a comprender por qué comenzar desde ahí-, un epílogo -donde todo termina concordando de manera acertada- y trece capítulos -que están definidos por la época y el sitio donde transcurren los hechos contados-.
Si he de sincerarme, tengo que decir que la presente publicación ha sido de lo mejor que llevo leído en el año, seguido de Mientras escribo del tito King. Y es que, Grabada en la arena, presenta un relato crudo (muy similar a los de V. C. Andrews) tan realista, que se parece mucho a la ficción, pero que, con notabilidad, la supera.
La pluma de Regina Calcaterra es como la seda: te deslizas por el relato y, aún en los pasajes más intensos o difíciles para su persona, quieres seguir leyendo, te impulsas desde su propia fortaleza.
Regina, Rosie, Camille, Cherie y Norman. Hallé esta foto en la web y me emocioné mucho, ¡la descripción es taaan parecida! |
Les confieso que a menudo suceden cosas raras cuando leo (bueno, raras para los demás, eso está claro. Relacionadas con mi sensiblería, eso también), y en esta ocasión no fue la excepción: con Grabada en la arena, no pude sino sentir admiración por la lucha personal de Calcaterra y los logros que tuvo junto con sus hermanos (que sufrieron incontables cosas como ella), y cada que veía su foto en la solapa de mi ejemplar, se me anegaban los ojos en lágrimas, pues mi ser se conmovía en un gesto de profundo amor, por alguien de tal temple y fortaleza. Y ese, para mí, queridos seguidores, es el poder de una obra literaria.
En síntesis, Grabada en la arena, se trata de un libro que retrata muchas vivencias de la autora, una historia de resiliencia, de un grupo de hermanos que han tenido la capacidad de seguir a pesar de tener una madre perturbada y ser constantemente golpeados por el destino... Grabada en la arena, es la prueba de que no importa lo que te suceda, sino lo que aprendes de cada suceso y el cómo actúas en consecuencia.
Mi puntuación:
*Gracias a Suma de letras por el ejemplar para reseña.